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jueves, 20 de diciembre de 2012

La industria en España





Las regiones tradicionalmente más industrializadas en España son Cataluña, Madrid, la Costa Cantábrica (Asturias, Cantabria y, especialmente, el País Vasco) y Valencia. Entre ellas, las que más destacan son Madrid y Barcelona.
Destacan los alrededores de Madrid y Barcelona y los ejes de desarrollo del Ebro, que comunica el País Vasco con Cataluña, y del Mediterráneo que se extiende desde Girona hasta Murcia. Además de estos, hay otros interiores, como el Corredor de Henares, que se extiende desde Madrid hacia el norte. En cuanto a los ejes regionales secundarios, Ferrol-Vigo, Palencia-Valladolid, del Guadalquivir (Huelva, Sevilla, Cádiz), etc.
El declive ha afectado a Asturias, a Cantabria y al País Vasco, aunque Euskadi empieza a recuperar las tasas de crecimiento industrial que había perdido. Asimismo, esta situación ha influido en áreas del interior (Puertollano, en Ciudad Real; Ferrol, en A Coruña; la bahía de Cádiz, etc.).
Los factores que condicionan esta distribución de los espacios industriales son los siguientes:

a) La concentración de centros industriales en diferentes zonas, como Madrid y Barcelona:

·Su condición de grandes áreas metropolitanas que cuentan con una amplía demanda, disposición de mano
de obra, infraestructuras y comunicaciones, servicios financieros, etc.
·  La atracción de nuevas empresas y fábricas que se benefician de la proximidad a otras industrias cercanas.
· El éxito al sustituir los sectores en crisis por sectores de alta tecnología.
·El apoyo que realiza el estado a la instalación de empresas en estas zonas, mediante la construcción de
parques tecnológicos.
·Madrid, Barcelona y Euskadi concentran actividades que necesitan grandes inversiones, grandes
instalaciones, importantes vías de comunicación, etc.

b) El desarrollo de los alrededores de Madrid y Barcelona se debe a:

·        - La proximidad y accesibilidad a los grandes centros urbanos, los mercados y los centros de distribución.
·        - Las dotaciones de suelo industrial
·        - La situación estratégica de las vías de comunicación

-La conformación de los ejes de desarrollo se debe a:
·         -La congestión industrial de las zonas tradicionales (encarecimiento del suelo en las áreas industriales, incremento de los costes de transporte y mano de obra, saturación de las infraestructuras, etc.)
·         -La mejora generalizada de los sistemas de transporte y comunicaciones, llevadas a cabo tanto por el gobierno central como por las autonomías desde los años 80.
·        - La situación geográfica: El eje del Ebro aprovecha los beneficios geográficos de su situación entre el País Vasco y Cataluña, y la accesibilidad a la Meseta desde el valle del Ebro.
·         -Las altas densidades de población en el litoral proporcionan un importante mercado del que se beneficia el eje Mediterráneo, lo que explica la importancia de la industria textil del cuero y del calzado en Cataluña y Valencia. La industria textil catalana constituyó uno de los pilares de la industrialización, aunque ha experimentado cambios profundos, por la sustitución de las fibras orgánicas (lana,lino, algodón) por fibras de origen químico, y por la reestructuración de las empresas, que han aumentado de tamaño. La industria de la confección sigue formada por un alto número de pequeñas industrias que, al igual que la industria del calzado, se encuentra muy dispersa.
·         -La inducción por el estado en los años 60 de la industrialización de zonas como  Zaragoza, Valladolid, Burgos y Huelva-Cádiz-Sevilla, que favoreció la implantación de la industria petroquímica y a la industria química de base, en grandes complejos industriales, por lo general asociados a las refinerías de petróleo (Huelva, Algeciras, Cartagena, etc.)
·         -La mayor implantación de pequeñas y medianas empresas que propicia la implantación de sectores dominados por estas, como la siderurgia no integral    (que obtiene acero en hornos eléctricos a partir de la refundición de la chatarra) que se extiende en Navarra, Asturias y Cataluña, o la industria de transformados metálicos, que fabrica una gama de productos que abarca desde la ferretería hasta la maquinaria y que está muy dispersa, localizándose tanto en Cataluña y Madrid, como en el Valle del Ebro y Euskadi.

c) El declive de las áreas industriales se debe a:

· La crisis de los 70 y 80 que se cebó particularmente en los sectores situados en la cornisa cantábrica (metalurgia, petroquímica, naval), y cuya caída ha tenido repercusiones muy negativas en las pequeñas y medianas empresas relacionadas con ellos.
·La industria siderúrgica integral, que obtiene acero en los altos hornos a partir del  mineral de hierro, se consolidó en el País Vasco, para luego extenderse al Mediterráneo (Altos Hornos del Mediterráneo) y a Asturias (Ensidesa). Fue impulsada por el estado, a través del INI que construyó grandes acerías. Su sobredimensionamiento respecto a la demanda española, y su carácter estatal, hizo que la CEE obligara a su cierra, lo que provocó un importante  conflicto con los trabajadores.
·La construcción naval es otro de los sectores más importantes de nuestra industria  tradicional. Por iniciativa del INI se construyeron grandes astilleros en enclaves significativos del litoral (Ferrol, Cádiz). Su estructura empresarial era la de grandes empresas públicas (Astano, Empresa Nacional Bazán) especializadas en la construcción de buques petroleros y graneros. La crisis del petróleo afectó a la industria de construcción naval; por un lado, se evidenciaron las deficiencias estructurales de nuestros astilleros, por otro, el encarecimiento del crudo obligó a transportarlo en barcos de tonelaje medio. A partir de 1990, descendió la construcción de barcos y el sector concluyó una dura reconversión industrial, que generó desempleo y cuyos efectos sociales trataron de paliarse con incentivos y concesión de zonas de urgente reindustrialización (bahía de Cádiz). La medida ha constituido un fracaso, como el cierre de los Astilleros de Cádiz y Huelva demuestra.

sábado, 1 de diciembre de 2012

Tipos de vegetación en España.




En España existen 3 grandes áreas de vegetación:


  • Vegetación de tipo oceánico: Se da en la zona Norte de la Península y en algunas zonas montañosas. Los árboles son de hojas caduca y necesitan mucha humedad.

  • Vegetación de tipo mediterráneo: Se da en la mayor parte de la Península (en el interior y en la costa mediterránea). Los árboles son de hojas perenne, y están adaptados para soportar la sequía de los veranos.

  • Vegetación del archipiélago canario: En Canarias existe una vegetación de origen mediterráneo pero con influencias africanas y atlánticas. Su vegetación es variable ya que depende de la altitud, la orientación y la cantidad de lluvia que recibe.





La vegetación de un lugar depende, principalmente, de los factores climáticos (latitud, posición geográfica, relieve, ...). Además, en las zonas de montaña el tipo de vegetación que crece depende de la orientación:

           - La umbría: está orientada al Norte y recibe menos sol, es más húmeda y con vegetación abundante.
           - La solana: oreintada al Sur, es más soleada, seca y cuenta con una vegetación menos densa.



Comentario de Cliserie


La cliserie nos muestra la vegetación característica de la Cordillera Cantábrica. Lo primero que debemos señalar es que se constatan las diferencias de vegetación en función de la altitud y también en función de la vertiente.

Iniciando el análisis por el piso basal, nos encontramos la primera diferencia: la fachada norte (umbría), más fresca y húmeda, está ocupada por el roble, especie caducifolia característica del bosque atlántico; mientras que en la fachada sur (solana), la especie dominante es la encina, capaz de soportar unos fríos inviernos. La encina, la formación más significativa del bosque mediterráneo perennifolio, ocupa las solanas más templadas de esta vertiente interior cantábrica. La ladera norte de robles tiene un aprovechamiento forestal y maderero muy habitual para la fabricación de muebles, aunque debe ser de tala controlada por la reforestación de éstos hábitat es muy complicada y duradera. En la ladera sur el encinar permite un aprovechamiento ganadero, gracias a las bellotas, pero también aprovechamiento maderero por el carbón vegetal que proporciona la encina.

A continuación, en el piso montano, se encuentra el rebollo, especie marcescente de transición hacia la región mediterránea, que soporta muy bien la bajas temperaturas, incluso mayor sequedad que la tolerada por otras especies de robles. Tradicionalmente la madera de estas especies se ha aprovechado para la construcción y para hacer leña, y su fruto para alimento del ganado, en algunos casos, humano.

Culminando el estrato arbóreo se localiza la caducifolia haya, que junto al roble define al bosque atlántico. El haya es una especie que soporta mejor el frío que el roble, por lo que tiene a sustituir a estas en las áreas de montaña. En la cliserie cantábrica se extiende de los 600 a los 1.700 metros en la fachada norte, y de los 1.400 a los 1.700 metros en la fachada sur. Esta diferencia entre laderas se debe a la necesidad de humedad que tiene esta especie, por lo que en la solana se limita a los niveles superiores.

En el piso subalpino, encontramos situada la landa, que es una formación arbustiva propia del clima atlántico, que surge como degradación del bosque caducifolio o en aquellos lugares donde las condiciones climáticas (zonas elevadas de las montañas) impiden el desarrollo de los árboles. Son propias de esta formación plantas como el tojo y el brezo.

Por último, en el piso alpino, por encima de los 2.200 metros, encontramos como formación vegetal dominante los prados. En este piso se acumulan las nieves en invierno, lo que impide el desarrollo de una vegetación de mayor porte. Estos pastos suelen ser aprovechados para la alimentación del ganado cuando se encuentran libres de nieve.